¿Estás empezando a imprimir en 3D y los resultados no son los que esperabas? ¿Te gustaría conseguir piezas más definidas y sin errores? No desesperes. Te ofrecemos varios consejos para la impresión 3D para que te desenvuelvas sin complicaciones, pero recuerda que siempre puedes ponerte en contacto con Triwee para recibir nuestro asesoramiento.
Revisa siempre el laminador
Es importante comprobar la previsualización que nos ofrecen los programas slicers o “laminadores” que calculan las intersecciones del objeto 3D y determinan sus secciones antes de dar comienzo a la impresión. Así, gracias a estos programas que actúan como si dividieran el objeto en “rebanadas”, veremos una aproximación del resultado que obtendremos tras la impresión y evitaremos llevarnos sorpresas. Este es un buen momento para modificar los parámetros de impresión.
Vigila la nivelación de la cama
Este es un paso importante para el que hay que tener en cuenta factores como que las correas estén tensas en vez de flojas. Conviene hacer un nivelado sencillo antes de empezar a imprimir y comprobar que está bien con un folio.
Esta recomendación aplica a la primera capa, pero también a las tuercas excéntricas. Limpia a fondo la base y la boquilla para no tener problemas por la adhesión a la placa.
Falta o exceso de material
Es posible que tengas filamento de sobra pero aún así te encuentres problemas de subextrusión, es decir, que no salga suficiente material por la boquilla y queden espacios vacíos entre capas (o sobreextrusión, que salga demasiado). Esta incidencia suele estar relacionada con el diámetro del filamento indicado en el software, pero también puede tener que ver con la cantidad de material extruido.
Aparición de agujeros
¿Has impreso una figura pero le ha salido un agujero en lo alto de la cabeza? Este es un error común en piezas huecas. Verifica que el modelo tenga suficientes capas interiores sólidas en su parte superior. Se recomienda que haya un grosor de 0,5 mm en el borde superior y aumentar la densidad de llenado.
Detalles finos
Si los detalles más finos de tu modelo 3D no se imprimen hay algunas soluciones. Puedes utilizar una boquilla de menor diámetro para tu impresora, y si el problema persiste puedes volver a imprimir la pieza con características más gruesas. Softwares laminadores como Cura pueden ayudarte a evitar estos problemas ya que verifican que los modelos no tengan partes demasiado delgadas.
Warping
Se denomina warping a ese error de impresión en el que las esquinas tienden a curvarse y deformarse. Una buena forma de evitarlo al imprimir con ABS es utilizar un fijador para que la primera capa se pegue correctamente. Otra opción es crear “brim”; una especie de alas que evitan que la pieza se despegue de la base caliente, en el programa slicer. Además, es recomendable evitar que las corrientes de aire afecten a la impresora 3D ya que estas pueden provocar que el material se retraiga demasiado y se despegue de la base.
Empieza despacio
Si quieres supervisar que las piezas salen bien con frecuencia y prefieres evitar largas esperas en las que no conoces el resultado, es interesante comenzar con tiempos de impresión de 30 mm por segundo y piezas que no superen las 2 horas de duración. Así, si el resultado es bueno, puedes ir incrementándolas.